A day is just a word.

There are certain words that should not be whispered.
Others that should not even be pronounced.
Words, should maintain their virtue.
And some can only maintain their virtue if they are shouted out.
Naked.

Words are as fragile as the organs with which they are vocalized.
Certain words should not be whispered.
Certain words should be spat out.
Wet.

Because words mean more than what a dictionary can describe.
They should anyway.

Words are the only weapon against my fears, against yours.
And you, among all other people know the difference a word can make.
"Hola."
An introduction to a whole other world that resides in a single word.
A single syllable.
A single world.

Life is more than what anyone can make of it.
As words are more than what anyone can make of them.
We are always stuck between our words and you can only become free if you acknowledge their power. If you become part of the meaning that you want them to reflect upon others´ understanding of them.
Life is as long as it is short.
And we, passerby in a circle of endless scenery.
Too dazed to shout out the words that should not be whispered.

Porque hay escasez de galletas.

Mi rostro está encendido,

acalorado de caer en cuenta de tantas realidades,

Cada una, única.

Resulta que el día no termina con la aurora del próximo que se asoma detrás, debajo del cielo estrellado.

Resulta, que al igual que éstas, los días no son más que letras,

que son un conjunto de hechos más o menos parecidos.

Con rasgos que hacen que quepan juntos, dentro de un mismo cajón.

Resulta que mi amor se ha resbalado dentro de cajones ya archivados,
que quiere hacerse caber dentro de estántes que le quedan muy cortos.

que se hace bolita para dirigirse hacia ese amor que fue catalogado como imposible.

Y es que es imposible.

El amor ha sido hecho a medida para caber dentro del molde de lo imposible.

Estoy segura, plenamente segura, que te he escuchado llorando.

He sentido tus lágrimas caer de entre tus enormes pestañas.

Tú también has estado archivando.

Tú también padeces la desgracia de tener que archivar sentimientos en cajones, que no le hacen justicia a su contenido.

Y por eso, escribo.

Te escribo.

A falta de otra manera de entregar mis sentimientos.

Ninguna manera me satisface, más que tejiendo palabras.

Desempolvandolas, dándoles un sentido que sacuda el peso de vivir su vida dentro de un cajón.

Y así mis palabras se dirigen hacia abismos y caen en peligro.

Pero cada que son leídas son rescatadas. 

Son puestas a salvo, dentro de un universo alterno.

Reproducidas distorcionadas.

Amorfas, y con suerte, desgastadas.
Con suerte lograrán borrar su código de barras.

Lámeme.

Mi locura y la tuya no se parecen.
Se evaden.

Evitan tocarse.

Se rozan de lejos, con risas y viento.
Envidiosas, 

Ajenas.
Cada una con traumas que las embriagan.
Nunca sobrias.
Porque no hay mar en calma.

Te escribo paisajes, valles, soles, mares.

Te veo en ellos.

La luz de tu mirar me acaricia los labios.
Me besas entre el ruido del silencio, 

Nos rodea, no nos deja. 

No me deja.

Silencio.

Ruido.

Olor a flor de muerto;

Es nuestra idea, 

Así identificamos la muerte.

Ilusos, crédulos siempre.

Yo que no te creo, te siento.

Siénteme tú.

Lame mi tinta, sangre de mis pensamientos,

Expuesta,

Vulnerable a ser leída, tocada, usada. 

Interpretada.

Cuento p.1

Los cuentos que nos contaron al querer estremecernos han sido mentira.
El hombre digno, honorable, no vive en castillos.
Ni lucha por él mismo.
La dignidad no se negocia,
Las convicciones no se intercambian.

Nos han mentido.
Y siguen mintiendole a nuestros niños.

Habrá que escribir cuentos nuevos para leerles.
Historias vivas, que muestren a todo a lo que nos hemos comprometido.
Que derroquen al sistema que nos envicia con imágenes vacías,
que olvida que nuestros niños siguen siendo niños
Con imaginación inigualable,
Con pureza intacta.

Nos están robando a nuestros niños.
Nos alejan de sus risas, de sus chillidos.
Ya no hay niños en la calle,
Las calles son canchas de guerra entre corrupción y pobreza.
Todo lo demás cae entre éstas.
Corrupción y pobreza.

Áoc.

Life is short.
Ironic.
Life is based on trivial necessities that give deep satisfaction.
Life is trivial itself.
Love is not.

Love ties itself onto your insides.
It bleeds along with your body, it screams along with your mind.
It becomes you, it doesn´t have to be anything on its own.
It isn´t anything on its own.

I waited up all night.
I saved the thoughts I have not been able to verbalize.
Barely slept.
Barely ate.

I crawled in and out of my skin.
Tried to exchange it for others´.
Those who don´t fall in love quite as hard as I.
Those who define love.
Those who dare not fight for its pleasures.

I am torn apart.
Between myself and that of which I love.
Life, is gone, it´s going as we speak.
Love, has stayed... through and through.

And I.
Guilty.
Asleep only to avoid the weight of the hours.
Awake only to get away from the nightmares.

Aceptar(lo)

Contemplar desde tus ojos la existencia.

Comunicarme con palabras que juegan por sí mismas a saber qué es lo que realmente quisiera decir.

Sobra decir que fracasan.
Que me es imposible calificar cuan ácidos son los días,

Cuanto me revuelve el estómago ver lo hermoso de la luna.

El día ha sido largo, apesar de ser tan banal.

He recorrido varios mundos que al final regresan a ti.

He hecho de la vida un sinsentido sólo para caer en cuenta que no existe tal.

La vida no tiene sentido

Y apreciarlo es apreciar lo agridulce de la vida.

Estar consciente de lo ridiculo que es ser optimista.

Estar consciente que esa ridiculez es lo único que te mantiene con vida.

Estar vivo.

Estamos vivos.
No es que juguemos a estarlo.

A mis escasos años he entendido lo que significa esto.

Cuánto place y cuánto pesa.

Cuánto dudas y lo poco que realmente cuestionas.

La vida es larga, pero poca.
Cabe en un mundo,
Cabe en una galaxia.
Que al final es sólo una mancha.
Y al final la vida es sólo una particula en un mundo de particulas
en un sistema de particulas
En una galaxia hecha de particulas.
La vida es larga.
Hecha de pequeños acontecimientos que conforman lo trágico o èpico de cada vida.
Tragedias.
Que ponen en aprietos al optimista.
Que lanzan dudas, dagas, que al final resultan hechas de algo más que sólo dudas.
Son verdades.
Son HECHOS.
Realidades.
Aceptar que ambos
bien y mal son legitimos. es algo que me sigue jodiendo la vida.
Aceptarlo.

Septiembre terminó.

He escrito muchas veces.
Con lágrimas.
Sí, soy frágil.
También eso lo he escrito.

Lloro por motivos suaves,
lloro por realidades dolorosas,
realidades que no hacen eco en mi alma,
Que hacen huecos, que desgarran,
que atacan con la misma saña con la que atacan a nuestras mujeres, a nuestros niños, a nuestros hombres.

Un cuerpo desnudo,
desmembrado.
Disuelto en ácido.
¿Quien quiere contarle esa historia a sus hijos?
¿Quien quiere que esa imágen retumbe en la mente de una sociedad entera?

He cuestionado, le he dado vueltas...
¿Debo pagar con dolor, con sangre ser hija del Siglo XX ?
Ser mujer en el siglo XXI.
Ser estudiante,
Ser pensante.
¿Debo lutar día tras día nuevas tragedias?
Nuevos censos que contabilizan pero no hacen más que naturalizar la violenta muerte que ronda, que sigue rondando, en Veracruz.

He despertado angustiada,
he hecho de mi casa mi única guarida.
He renunciado al "coto"
He cambiado mi atuendo,
he conseguido un gas pimienta,
Incluso he pensado en tomar clases de defensa personal.
He conciliado conmigo misma, morir antes de ser secuestrada, torturada, mancerada, violada,
Porque todos tenemos derecho a la vida.
A una vida digna.
¿No para ello luchan los religiosos anti aborto?
¿No con ello intenta legitimarse el Estado?
Una vida digna va de una muerte digna, pues la muerte debe llegar de frente, como nos llega la vida.

He vuelto a ver la muerte de frente.
Y ya no trae una rosa en la mano,
Trae un arma, una sonrisa mustia que se parece a la que traen todos los hombres que me han agredido por la calle.
Soy mujer.
Soy joven.
Y las estadísticas apuntan todas en mi contra.
¡Qué triste!
¡Qué tristeza ser mi madre!

Veracruz se desmorona, social, económica, políticamente.
Huir... ¿huir?
La muerte te sigue por todo el país.
Se ha comprobado...
Guerrero
Michoacán
Chihuahua
D.F.
Jalísco
Tamaulipas
Puebla
Coahuila
Guanajuato
Nuevo León
Baja California
Y realmente valdría la pena listar cada uno de los 32 estados
Vivimos en un estado crítico, un estado/Estado de muerte.
Una enorme fosa clandestina

Es Octubre
Y pronto tendremos que velar a nuestros muertos.
Tendremos que convencernos que es mejor actuar,
que ya nos ha tocado lutar suficiente.
También es inútil rezarle a Dios o a un santo.
Que los que nos asesinan tienen sus propios santos.
Es Octubre y no soy la única ni la primera que escribe sobre ésto.
Es Octubre y van más de 2 años que no hay respuestas
Es Octubre y va más de un 1 año que Xalapa quedó desnuda.
Es Octubre y el año termina con notas laudatorias para el país, experto en sadísmo y muerte.
Mi muerte.
La tuya.

My girl

A éste momento de la vida, a éste preciso momento, le pondría por nombre, felicidad.
Y después, lloraría como niña.
Con una sonrisa al estilo Monalisa.
Desnuda sobre mi cama... depués de haber bailado mientras cantaba una vieja canción que hasta hace poco me era desconocida.

La felicidad ha sido tratada por muchos.
Desglozada e interpretada de tantas maneras.
Forzada a caber dentro de contextos, de cajones, dónde se ha rehusado a ser confinada.
La felicidad, esa, que expiras cuando puedes sacudirte la tragedia,
Cuando miras a los ojos a tu hermano y sientes que te acobija, que te abraza con la fuerza precisa que necesitas.
Esa, es la felicidad que necesita ser plasmada sobre hojas.
Impresa en fotografías.
Grabada en la memoria.

Quisiese que sintieran lo que retumba en mi mente,
que cae como lluvia por mis venas y que fluye ligera por mi cuerpo.
No precisa de léxico, todos en la habitación lo han sentido.
La felicidad como arma, como insignia única del escuadrón que va de frente hacia la vida.
Que ve de frente hacia la vida.
Que no baja la mirada aún cuando ésta lo intimida.

La vida y la felicidad son cómplices eternas.
Escondidas entre palabras que a ninguna definen.
Y si dejamos de cuestionarlas tanto,
Y si aceptamos que siempre las cuestionaremos y hay que saber qué hacer con lo que cae de nuestra boca hacia la construcción de nuestro propio imaginario...
Seríamos vivos.
Seríamos hombres de presente y no hombres atorados en futuros inexistentes.
Seríamos.
Reflexivos.
Combativos.
Aguerridos.
Felices.
Felices por saber que no vamos a ninguna parte.
Que estamos justo en esa parte.
Que lo demás es puro cuento.
Que mañana es inexistente,
Que soy feliz y sólo queda serlo.
Y sólo quedan las sonrisas que construyo,
Los ideales que deconstruyo
Y la bandita que me permea
A quien también permean mis ideas.

Este momento es felicidad.
La plenitud de mi ser dentro de su condición humana.
Se llama felicidad y por esta noche, quizá sólo por esta noche, es mía.