He creído en lo sacro en su momento
He creído en la firmeza de mis pies sobre esta tierra
Y te he hecho mi emblema
Has sido en la noche mi vela
En desierto mi hoguera
Porque he creído en mi suerte
Que se hizo grande y me dió el valor de hacerte
De darte dos manos, dos pies y mi trote
Mi vaivén que grita madre
Y mis senos que lo susurran, suave
He creído en mis ganas
En la convicción de construir futuro sobre tu almohada
De acariciar pasado en tu apellido
Hecha tu madre y hecha mía
He creído en lo sacro por lo sagrado de esta sangre
Derramada por tus venas
Mezclada con la magía del amor hecho carne
Y te digo madre
Y me digo madre
Para las voces no hay más que la palabra
Para la fe no hay más que la voluntad
Yo no nací para ser madre
Y hoy no tengo ni pizca de niña, de mujer, de amante
Tengo dos pies, dos manos y mi trote que grita madre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario