viernes, 19 de agosto de 2016

Otra cara de la felicidad.

Pasan las horas,
cómo pesan.
Pesa más saber que pesan.
Que caen sobre mí como las gotas de lluvia sobre una hormiga.

Pesa saberte lejos.

Siento aleteos en las entrañas cuando te veo,
y revolotean con fuerza cuado no estás y te pienso;
En el calor de tu beso,

Tu piel y luego tu aliento.

He dormido sin ti.
No me ha gustado.
Mi cama no me abraza,
no me guarda entre su calor.
Mis sueños tampoco son ricos,
como cuando tu cuerpo escuda de ellos todo mal.

Mis sueños sin ti no saben igual
Sin ti son efímeros,
no mojan mi piel.
Quedan sólo como malos momentos que nunca pudiste recordar

Me preocupa quererte tanto.
Me preocupa entregarte el alma y quedarme sólo con mi frágil cuerpo.
Y quizá ni eso.
Que ese también te lo he entregado.

Él también te añora.

Pasan horas.
Pesan sobre mi alma.
Devoran con voracidad mi cuerpo.
Y a cada segundo de ello, te pienso.

No hay comentarios:

Publicar un comentario